¿Cuál es la opción preferida para teletrabajar?

Teletrabajar se ha convertido en una práctica mucho más habitual desde la irrupción de la pandemia por COVID-19. Muchos autónomos, pequeñas y medianas empresas han probado ya, en alguna de sus modalidades, esta fórmula que permite al trabajador prestar servicios desde una ubicación distinta a la habitual, normalmente desde su domicilio.

En CEDEC, consultoría de Organización Estratégica líder en Europa en gestión, dirección y organización de empresas, trabajamos desde 1965, valoramos de forma muy positiva el trabajo a distancia. Gracias a las nuevas tecnologías, nuestros empleados pueden seguir realizando sus actividades desde cualquier lugar, con una mayor flexibilidad horaria y un mejor rendimiento, lo que repercute en un mayor beneficio para nuestro negocio. 

Sin embargo, y aunque pueda parecer una opción deseada por la mayoría, según un estudio realizado por la escuela de negocios IESE, solamente el 12 % de los empleados quiere trabajar a distancia todas sus jornadas laborales. De ese pequeño porcentaje, quienes desean trabajar cada día con esta fórmula son mayoritariamente mujeres (64%) que rondan los 40 años, casadas, con hijos y con más de cuatro años trabajando en su empresa.

De estos datos, se desprende que la conciliación de la vida laboral y familiar es la principal razón que justifica la preferencia por no acudir a su empresa y quedarse en casa trabajando. A eso se añade el ahorro de tiempo y dinero.

En el lado opuesto está el 4% de los empleados que desean acudir cada día a la oficina. En este caso, sus motivaciones se centran en la posibilidad de desempeñar sus cometidos en colaboración con sus compañeros y la imposibilidad, o falta de recursos, para trabajar de forma remota porque carecen de la tecnología o medios necesarios.

Así pues, ¿cuál es la fórmula preferida a la hora de disfrutar del teletrabajo? Según el citado estudio, el 36% de los encuestados afirmó que elegirían trabajar a distancia tres días a la semana, mientras que el 32% escogería dos días. Esto significa que el modelo híbrido es el preferido por la mayoría de los trabajadores, porque les proporciona la mayoría de las ventajas de ambas modalidades, a la vez que el mínimo de inconvenientes.

Siendo conscientes que, por su idiosincrasia, muchos negocios no pueden optar por esta modalidad, el informe destaca que, cuando se teletrabaja dos o tres días a la semana, la productividad aumenta en un porcentajes que rondan un 19%, mientras que la calidad del trabajo lo hace en niveles cercanos al 18 %. Por otro lado, el modelo híbrido evita que se produzcan bajadas de productividad derivadas de la falta de coordinación y diálogo que se hace posible solo cuando hay presencialidad. Además, rebaja los niveles de estrés asociados a los desplazamientos desde el domicilio al trabajo y viceversa.

Otro factor tiene que ver con la innovación y la creatividad. Aquellos que, habitualmente son poco creativos, mejoran estos aspectos al encontrarse rodeados de sus compañeros en el lugar de trabajo habitual. Aunque los datos reflejan que, aquellos que suelen tener altas dosis de creatividad, aumentan su concentración y capacidades cuando teletrabajan. Trabajar desde casa disminuye el estrés vinculado al desplazamiento (63%), pero también aumenta el aislamiento social (15%) y limita la generación de confianza y cohesión entre los equipos (11%).

El estudio concluye que lo deseado es que el trabajo en remoto varíe y se desarrolle entre el 40% y el 60% de los días laborables. En definitiva, en CEDEC, consultoría de Organización Estratégica para todo tipo de empresas, destacamos que, por encima de todo, el trabajo debe estar vinculado a una cuestión de flexibilidad por parte de los actores implicados y las propias necesidades del negocio. Un camino paralelo con el objetivo de alcanzar la Excelencia Empresarial de toda la organización