Estrategia
Empresarial
La creación de valor pasa por nuevos enfoques.
No compiten las empresas, compiten los modelos de negocio.
Innovación de productos y de las relaciones con los clientes, nuevos procesos y modelos de negocio, fin de ciclo de productos o de personas clave, competencia, globalización y cambios tecnológicos... las nuevas formas de hacer negocios desafían las estrategias y las operativas tradicionales. En este contexto, la planificación estratégica es más necesaria que nunca y marca la diferencia entre ganar o perder la batalla del mercado. Ser reactivo ya no es suficiente en una era donde la anticipación es la base del éxito en los negocios.
En el día a día de un negocio familiar es muy difícil crear conceptos y estrategias innovadoras. La falta de perspectiva y de tiempo desembocan en reflexiones que conducen a soluciones similares a la competencia o a estrategias insuficientes.
Si la competencia crea valor en el negocio y usted no o el que crea es el mismo que su competencia, su propia pasividad está jugando a favor de la competencia. Por lo tanto, la estrategia es, ante todo, un acto de responsabilidad con uno mismo y con la empresa.
¿Qué hacemos por usted y su empresa en CEDEC Estrategia Empresarial?
Aceleramos el cambio en las organizaciones que afrontan retos de evolución, desarrollan ideas de negocio o se encuentran en un escenario complejo que requiere una gran coordinación de recursos y de enfoques.
Aportamos nuevos enfoques estratégicos tanto en situaciones de marca o negocio como de operativa con el objetivo de desarrollarse y generar valor. A su vez, traducimos las estrategias en acciones operacionales que, finalmente, ejecutan el plan estratégico.
Definimos decisiones estratégicas que compatibilizan su visión como propietario del negocio con el desarrollo de la ventaja competitiva, diferenciándose así de la competencia. Integrando en nuestro enfoque los objetivos a medio y largo plazo, la ejecución de los planes de acción en un cuadro de mando integral, la asignación de los recursos necesarios y los puntos de control que llevarán a la consecución de los objetivos.
Crear su espacio de vida y su futuro.
Una empresa puede desarrollar sus virtudes actuales hasta el límite de las propias capacidades de quien la dirige. No obstante, el volumen de conocimientos y experiencias que podemos acumular tiene un límite. En momentos así, es necesario disponer de nuevos patrones de referencia.
En la empresa deben convivir dos importantes operativas bien diferenciadas: la del día a día y la de la construcción del futuro. Muchos negocios disponen de elementos que, en su momento, los hicieron competitivos pero que actualmente han quedado asimilados por el entorno y la innovación de modelos.
Vivimos en un mundo abierto a las oportunidades, hay que aprovecharlas
La hierba no es necesariamente más verde en otro lugar, pero la internacionalización a menudo permite a una empresa que está un poco encorsetada en su mercado nacional desarrollar un negocio exitoso.
El aumento de la competencia a veces obliga a las empresas a buscar más allá. En la era de la globalización y el desarrollo de las nuevas tecnologías, este sueño de expansión no es tan difícil de alcanzar. Los cambios en las obligaciones legales y aduaneras, el fácil acceso a la información y las facilidades de pago... hacen que el proceso sea ahora más fácil que antes.
Al desarrollarse internacionalmente, una empresa puede aumentar su competitividad optimizando sus costes estructurales gracias a la ampliación de su área de actividad. Al poner en común ciertos costes, comporta la reducción de su impacto gracias a economías de escala.
Pero no de cualquier manera... Así que, para viajar lejos, es mejor viajar acompañado.
En CEDEC creamos valor para su empresa, protegiendo la continuidad y actuando sobre modelos de negocio que requieren una actualización de su competitividad estratégica.
Y recuerde
- Una buena estrategia marcará la diferencia entre ganar o perder la batalla del mercado. En un mercado tan competitivo, la anticipación es la clave.
- Es imprescindible actualizar nuestros conocimientos constantemente. Investigar nuevos patrones de referencia nos ayudará.
- Hay que saber diferenciar entre la operativa del día a día y la de la construcción del futuro, para marcar y alcanzar los objetivos de la empresa. Comprender bien el entorno competitivo y el ciclo de vida del negocio es lo que proporciona los principios para elaborar las nuevas estrategias.
