Publicado por cedec el 14-05-2019

Las empresas deberán pagar los incentivos vinculados a objetivos inalcanzables

Para las empresas, implantar un sistema de retribución variable basado en objetivos de productividad aporta muchas ventajas. Permite flexibilizar los costes salariales, mejorando la capacidad de la compañía para captar y retener talento. Por no hablar de su potencial para motivar y aumentar la eficiencia de los trabajadores. Pero, ¿qué ocurre cuando para cobrar un incentivo se debe llegar a un objetivo imposible de alcanzar?

En CEDEC sabemos que establecer un sistema de bonus es una posibilidad que muchas empresas deberían tener en cuenta, pero también hay que saber que para que funcionen los objetivos a conseguir deben ser factibles. En caso contrario, no lograrán incentivar a los empleados y además, la compañía estará obligada a pagarlos a todos sus trabajadores. Así lo ha determinado la Audiencia Nacional, y por eso compartimos este artículo de Cinco Días donde se explican todos los detalles de la sentencia.



El origen de la misma está en un conflicto colectivo en el sector de los “contact centers”. Una empresa fijó unos incentivos por una media de número de llamadas por hora que era imposible de alcanzar si se tenían en cuenta los periodos de descanso y de tareas administrativas. Los sindicatos solicitaron, por lo tanto, que se impugnase ese sistema de retribución variable.

La resolución de la Audiencia Nacional, no obstante, indicó que no había ninguna obligación para que las empresas establezcan bonus, y que por lo tanto, cuando estas desean introducirlos, pueden decidir libremente los objetivos mensuales que se van a premiar. En este contexto, consideraron que no tenía sentido admitir la impugnación del conjunto de los mismos.

Sin embargo, recordaron las normas generales sobre la nulidad de las “condiciones imposibles” en los contratos, que se pueden aplicar a esta situación. Estas normas obligan a dar por cumplida una condición cuando esta no es posible de cumplir.

Es decir, la Audiencia Nacional determinó que cuando los objetivos fijados por una empresa no se pueden conseguir, ya sea por imposibilidad física, por no ser humanamente o jurídicamente posible o porque requeriría quebrantar la ley, se darán por cumplidos en todos los trabajadores, que deben cobrar íntegramente ese bonus.

En CEDEC, Consultoría de Organización Estratégica, consideramos importante que las empresas conozcan las posibles consecuencias de establecer objetivos inalcanzables, aunque también sabemos que una buena política salarial va mucho más allá del miedo a una sanción. Cuando un negocio apuesta por la retribución variable es para premiar a aquellos empleados que más se esfuerzan, lo que incide en la productividad de la compañía y le permite avanzar en su camino hacia la excelencia empresarial.

Imagen La República

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